domingo, 9 de septiembre de 2018

9 de Septiembre de 2018

Y lo desee.... y vino, ella vino, lo propuse de una forma sutil y vino, cogió el testigo, y aceptó.
Sí, lo hemos dejado, ya nada volverá a ser lo mismo, se acabo esa sensación de estar tranquilo, ahora, de nuevo voy a tener que buscar, a tener que conquistar y crecer continuamente, de esconder esas cosas que no me gustan de mi vida actual, como la de estar en un piso compartido.
Y la edad vuelve a sumar una unidad, otra vuelta completa y esta vez sin ningún tipo de interés en crecer profesionalmente, sino más bien en encontrar un amor, pero un amor verdadero, que me llene y con alguien que realmente me excite.
Es fácil pensar ahora que no voy a encontrar a nadie como ella, y que solo ella me podía entender en lo familiar y que podía entender mi total desinterés por lo profesional o por crear una vida basada en lo material.
Veamos lo que trae este nuevo año, 43, una cifra extraña... suma 7 dijo ella...

martes, 4 de septiembre de 2018

4 de Septiembre de 2018

Hoy de nuevo es uno de esos días más perdidos que vivimos, una cría 15 años más joven me ha dicho que realmente le importa mi edad para tener una relación o yo que sé.
Hoy me he reencontrado con un viejo compañero con el que he salido con una sensación más que desagradable, y no es la primera vez. Es como me hace sentir... tan poco equilibrado, tan prepotente, tan crítico... causaré yo esa sensación en M?
Es esa y solo esa la causa de mis problemas sociales y sentimentales? Esa sensación que causo por no ser natural, por juzgar demasiado, por estar todo el tiempo con el hemisferio derecho (o izquierdo) pensando y razonando, buscando números y aportando porcentajes.
Hoy tengo una tristeza rara, que se mezcla con soledad, con una nueva falta de libertad  derivada del hecho de vender 25 jornadas de nuevo al diablo.
Esta soledad me hiere, esta tristeza me engorda, esta sensación me vuelve pequeño.
No tengo una fórmula mágica, a veces, doy espacio a las sorpresas, como ocurrió el domingo, a veces no creo que vaya a ocurrir nada nuevo o bueno.
Mis objetivos son objetivos desde hace 10 años, y parece que me impiden vivir, el postergar, el tomar las decisiones más valientes.
Siempre estoy al borde del mejor en un momento futuro.